La noticia habla sobre la reciente comparecencia del
director de la NSA, el general Keith Alexander, ante la Cámara de
Representantes de Estados Unidos, mediante la cual trató de dar fin o al menos
alguna clase de explicación al escándalo del espionaje internacional.
Recientemente se hizo público que Estados Unidos ha
intervenido más de 60 millones de llamadas en España y Francia en los últimos
meses, noticia que se suma a la larga lista de revelaciones de espionaje que se
están dando a conocer y que además suscita irremediablemente el miedo en
cualquier ciudadano por la violación de su derecho a la privacidad.
Sin embargo, hoy la NSA dice que la noticia es una mentira y
una mala interpretación de los medios de comunicación que la publicaron, ya que
en realidad el espionaje se habría dado por parte de las propias agencias de
inteligencia española y francesa, además de que en ningún caso se habría
espiado a algún ciudadano, sino a ciertos agentes que ponen en peligro la
seguridad de los países miembros de la OTAN.
Desde mi punto de vista, estas declaraciones me parecen
(como decimos en México) “patadas de ahogado”, con el único fin de tratar de
lavarse las manos. Por más que se diga que no se espía a los ciudadanos, 60
millones de llamadas en un par de meses me parece una cifra increíble como para
tratarse únicamente de enemigos públicos. Además, el hecho de que fuera cierto
o no lo que señala el director de la NSA es independiente de los todavía más
graves casos de espionaje directo a llamadas y correos electrónicos de más de
35 líderes mundiales, asunto que hasta el momento no se ha aclarado.
http://internacional.elpais.com/internacional/2013/10/29/actualidad/1383074305_352044.html